Historia de la comparsa

La Comparsa Seguidores de Arún y Ruidoms nace en 1976 bajo el nombre de «Marinos Corsos», incluida en la ya desaparecida Agrupación «Cruzados de Cristo» y formada en sus inicios principalmente por vecinos del Barrio de San Francisco, siendo su primer presidente Francisco Torá.

Este mismo grupo de amigos decide tres años más tarde, en 1979, modificar el nombre de la agrupación, buscando una mayor consonancia y unión con la Fiesta y estableciendo el nombre actual en honor a los capitanes cristianos que acompañaron a la Armengola en aquella histórica noche del 16 de julio de 1242.

Tan solo un año después, en 1980 los Seguidores tienen el honor de organizar su primera Embajada, a manos de Manuel Cabrera Ruiz. La Toma del Castillo, con ariete incluido, es uno de los momentos que todavía se recuerdan en el barrio. El Embajador, a pie y bailando, recogía el reconocimiento de la ciudad.

En los 80 se forma la fila Tártara que, aunque solo desfiló tres años, se recuerda con cariño entre los socios de mayor antigüedad. La comparativa entre los Astures Armengoles y la vestimenta de esta fila desemboca en el fin de esta, generando el nacimiento de una nueva fila, los Incondicionales.

En 1990 los Seguidores tienen la responsabilidad de dirigir la Reconquista de la ciudad en su II Embajada, capitaneada por Francisco Torá. En esta ocasión, la máxima figura del Bando de la Cruz recorre a lomos de un elegante caballo las calles de la ciudad de Orihuela.

Si la fila Tártara es característica en los 80, los Pitotos es la fila por excelencia en los 90, contando en su historia con notables cabos como Pedro Albarracín, José Cabrera y Pepe Pertegal. A la par nace la fila femenina Solera, que desfila bajo las órdenes de su cabo Mercedes Fernández.

Durante esta década crece la leyenda de los Seguidores en lo referente a su gusto por el noble arte de la cocina, distinguiéndose como una comparsa familiar y gastronómica.

A finales de la década, en 1999, Eduardo Ferrández, otro de los buques insignia de la comparsa, tiene el honor de ostentar el cargo de Embajador en la III Embajada Seguidora. En esta ocasión el Embajador, subido en una gran carroza, recoge los aplausos del respetable, siendo acompañado por 40 guerreros sicilianos que, espada en ristre, combaten sin cesar con increíbles coreografías.

En este espacio de tiempo nace otra de enseñas de la Comparsa, la fila femenina Walkirias, en la que se unen jóvenes comparsistas provenientes de la fila Solera, dirigidas por su cabo M.ª Carmen Cabrera. Como decía el sabio griego, «no hay un genio sin un poco de locura», por lo que, para contrarrestar el genio de las Walkirias, nace la locura de la fila masculina Caballeros de Tolosa, compuesta mayoritariamente por los novios —ahora esposos— de estas. Desde entonces, como el yin y el yang, ambas filas se complementan, constituyendo la columna vertebral de la comparsa en los últimos lustros.

El comienzo de siglo resulta ser una época llena de altibajos, ya que un grupo amplio de socios decide dejar las huestes Seguidoras por motivos personales. Muchos de estos fundan la Comparsa Caballeros Templarios. Pasado un tiempo, ambas comparsas deciden celebrar anualmente una comida de hermandad, ya que son más los motivos que las unen que los que provocaron su escisión años atrás.

La Fiesta también deja atrás a grandes comparsas cristianas. Debido a esto, en 2006 los Seguidores recogen el testigo y vuelven a liderar el Bando Cristiano en su IV Embajada. En esta ocasión, José Cabrera, otro comparsista de pro, representa con orgullo las huestes cristianas.

En los años siguientes los Seguidores luchan, contra el viento, el frío y la lluvia del Mercado Medieval —un año incluso se nos voló la carpa— y contra la crisis económica, y también ante la evolución y crecimiento de la Fiesta, que poco a poco va dejando menos cabida a las comparsas de barrio. Son años difíciles, en los que la fila Solera se reinventa como fila mixta, desfilando orgullosos con el traje de Media Gala. La Junta Central de la Asociación de Fiestas sabe reconocer este esfuerzo, nombrando a Mercedes Fernández, Juan Antonio Sánchez (2009) y Saturnino Tafalla (2011) como Festeros de Honor, y a Miguel Ángel Tafalla como Pregonero en 2013.

Llega 2014 y Juan Antonio Sánchez es el elegido para representar a la comparsa y a su bando en la V Embajada Cristiana, marcando un antes y un después en el devenir seguidor.

En 2015, después de décadas en la Alameda de San Francisco, los Seguidores trasladan su Cuartel Festero al Parque de las Espeñetas, compartiéndolo con los Caballeros Templarios, en un hermanamiento entre comparsas sin precedentes que se repite dos años después.

En 2017 Conchi Cabrera es nombrada Armengola, siendo la primera dentro de las filas seguidoras, marcando otro punto de inflexión en la historia seguidora. A este ansiado nombramiento le acompaña el de Miguel Huertas como Festero de Honor 2016.

En 2022, tras los dos años de parón por la pandemia, con las ganas de fiestas saliendo a borbotones y alentados por una nueva hornada de jóvenes Seguidores, la Comparsa se sigue reinventando y traslada su Cuartel Festero junto al Ayuntamiento. Se crean la fila femenina Minerva y la fila masculina Guerreros de Alarcos, con componentes, muchos de ellos hijas e hijos de Walkirias y Caballeros de Tolosa, demostrando que los Seguidores no solo son presente sino también futuro.

En 2023, José Manuel Cabrera es nombrado Pregonero de las Fiestas. Ya en 2024, con un aumento en el número de Seguidores y una ilusión desbordante, la Comparsa encarga a Francisco Ruiz guiar a los suyos y a todo el Bando Cristiano hacia la victoria en la VI Embajada.

Filas

Cargos

Cada año la comparsa nombra los siguientes cargos festeros:

• Abanderada/o
• Abanderada/o Infantil
• Socio/a de Honor
• Arún
• Ruidoms

Embajadores

Encuéntrala en:

Esta comparsa instala su Cuartel Festero junto al Ayuntamiento
frente a la plaza de las Salesas.